Salvo que tengas espacio de sobra en casa y puedas (quieras) permitirte comprar un calefactor para cada estancia, la opción más lógica es la de comprar un calefactor portátil para llevarlo contigo allá donde sea necesario. Serían los equivalentes a los ventiladores en verano, pero con la capacidad de calentar las estancias en poco tiempo.
Por tanto, el único requisito imprescindible para poder hablar de calefactor portátil, reside en el hecho de que se pueda trasladar con facilidad de un sitio a otro, siendo muchas las posibilidades que caben en este punto de partida, como te puedes imaginar. Ya sea por diseño, por el empleo de una u otra tecnología, por potencia calórica, por tamaño del aparato, por marca o por precio, entre otras cosas, vamos a poder hablar de un amplio abanico de tipos de calefactores portátiles, para todas las necesidades del hogar.
Los que hemos mostrado en la comparativa de calefactores portátiles de arroba son sólo un pequeño ejemplo de las muchas opciones que nos encontramos en este segmento, pero vamos a tener la posibilidad de ver mucho más.
Los calefactores portátiles tienen su opuesto en el mercado en los calefactores de pared, que están concebidos para permanecer fijos en un lugar específico, y que tienen como principal atractivo en los tiempos que corren a los calefactores infrarrojos (modelos éstos que, por su peso y características, están concebidos en la práctica totalidad de los casos para permanecer anclados a la pared).
Calefactores portátiles: Índice
Calefactores portátiles cerámicos
La tecnología cerámica se ha consolidado en el ámbito de los calefactores como una de las más eficientes, superando los registros de los modelos de calefactores de convección y de las estufas tradicionales. Consumen menos, irradian más calor, son más duraderos, no requieren de mantenimiento, y no es un tipo de tecnología que implique el encarecimiento del producto.
Por eso, apostar por un calefactor portátil cerámico es siempre una buena idea, y no es de extrañar que los fabricantes sean los primeros en decantarse cada vez más por ellos, siendo muchas las posibilidades que ofrece el mercado.
Si quieres saber más sobre los calefactores portátiles cerámicos, y sobre los calefactores en general que emplean resistencias de cerámica, tenemos una página en exclusiva dedicada a ellos:
Calefactores portátiles de bajo consumo
Antes decíamos que el estandarte del bajo consumo en el mundo de los calefactores, todos los que usan infrarrojos, no se suelen fabricar en formato portátil, por el hecho de ser algo delicados y pesados. Además, es aconsejable colocarlos en lugares altos, para que el radio de acción de los rayos infrarrojos abarque lo máximo posible. No obstante, la marca reina del segmento, Klarstein, tiene en su catálogo algún modelo de calefactor portátil infrarrojo que puede valernos, con la apariencia de una estufa clásica:
- CALENTADOR RAPIDO: Gracias a sus 1300W de potencia, inclusos las habitaciones grandes de hasta 30 m2 se podrán calentar sin problema y rápidamente. La tecnología de rayos...
- TECNOLOGIA EFICIENTE: Gracias a la tecnología infrarroja, toda la energía emitida se transforma en calor y no se producen perdidas por convección o generación de luz....
- DIFERENTES USOS: Es ideal para habitaciones sin calefacción central, oficinas o salas de fiestas. Igualmente, proporciona calor rapidamente y sin complicaciones durante los...
- INSTALACION FACIL: La instalación es extremadamente sencilla. Solo toca enchufar el calefactor HeatPal Marble de Klarstein y listo. Gracias a sus patitas anchas no tendrá...
- CALIDAD: En 2008 Klarstein abrió su camino en el mundo de los electrodomésticos. Los aficionados a la cocina se alegran con la combinación entre materiales de calidad y...
Si no, los calefactores portátiles cerámicos serían nuestra opción más lógica si lo que buscamos es un aparato que nos dé calor y que no haga subir nuestra factura de la luz de manera desproporcionada. De todas formas, como en el caso anterior, tenemos también un espacio especialmente centrado en el segmento de calefactores con bajo consumo, en general.
Calefactores portátiles de torre
Tal vez el formato de calefactor portátil que se nos venga primero a la cabeza sea el de los aparatos de aire de tamaño pequeño, cuadrados, con un asa para su transporte. Pero también existen calefactores más ambiciosos con forma de torre. Al ser alargado, un calefactor portátil de torre consigue expulsar el calor de una forma mucho más eficiente, abarcando más espacio. Eso sí, estos aparatos están concebidos para ser colocados siempre en el suelo, por lo que debemos asegurarnos de elegir un modelo que cuente con una buena base, y a ser posible, con algún sistema de seguridad antivuelco y de apagado automático en caso de inclinación.
Otra de las ventajas de los calefactores de torre portátiles con respecto a los convencionales, es que casi todos cuentan con sistema de rotación automática, lo cual es una clara ventaja a la hora de repartir el aire caliente de manera eficiente por cualquier estancia. Con un aparato de aire caliente portátil que no tenga sistema de rotación, podemos hacerlo moviendo el dispositivo a mano de vez en cuando, pero no tiene nada que ver.
Esto, unido a la altura del aparato, hace que cualquier calefactor portátil de torre caliente las estancias antes, y con mayor precisión.
Calefactores portátiles de enchufe
Hay un extremo en el concepto de portabilidad aplicado al mundo de los calefactores, que viene representado por los calefactores plug-in (en inglés), lo que se refiere al hecho de ser enchufables directamente. Estarás pensando que sin son eléctricos, los demás que hemos mencionado también tendrán su correspondiente enchufe, y es cierto. La diferencia con respecto a los calefactores portátiles de enchufe es que éstos no llevan cable, sino que van enchufados directamente, haciendo el propio enchufe, al mismo tiempo, las veces de soporte de pared.
Por esa razón, los enchufes portátiles sin cables, enchufables, tienen que ser forzosamente ligeros y de tamaño pequeño o medio, ya que de lo contrario, estaríamos comprometiendo la seguridad del mismo. Estos calefactores portátiles de enchufe resultan muy prácticos, al no dejar cables colgando o arrastrando por el suelo, poniéndonos en peligro. Por el contrario, nos limitan a la hora de ubicarlo, tanto en la horizontal, como en la vertical.
El calefactor Taurus Tropicano que mostrábamos en la tabla comparativa al inicio es un referente en el mercado en este segmento, pero tienes que saber que hay otras muchas posibilidades.
Radiadores portátiles con ruedas
Los calefactores con un plus de ambición en cuanto a capacidad de calentamiento de las estancias, también pueden ser portátiles. Todo es cuestión de dotarles de los medios para ello, y el hombre ya inventó la rueda hace muchos miles de años.
Los calefactores portátiles con ruedas, si han sido dotados de un sistema de rodaje, es precisamente porque tienen un tamaño o un peso que así lo aconseja. De esta forma, además de resultarnos más fácil el transporte, no comprometemos la propia integridad del aparato al llevarlo y traerlo de un lado a otro constantemente.
A continuación, mostramos una selección de radiadores portátiles que emplean diferentes sistemas y tecnologías, aunque la mayoría en este segmento son de aceite.
Hay que tener en cuenta que tienen un consumo considerable, pero al mismo tiempo, hay que valorar también que los radiadores portátiles de aceite son bastante baratos en relación con su capacidad de calentamiento de estancias grandes, a razón de cero ruido (si los comparamos con cualquier sistema de calefacción de aire).
Por qué comprar un calefactor portátil
Como ya hemos visto, a la hora de elegir un calefactor portátil no tenemos la obligación de ceñirnos a un sólo concepto. Son muchísimos los sistemas, las formas, los diseños, etc. Por eso, lo primero que hay que destacar es que la portabilidad en un calefactor es una opción más allá de cualquier otra cosa. No es una condición restrictiva, ni siquiera si lo que buscamos es un calefactor de infrarrojos, como hemos podido ver con el Klarstein HeatPal Barble, aunque no sea ésta la tecnología que más opciones nos da.
Lo que está claro es que la posibilidad de llevar un calefactor a cualquier sitio nos va a permitir poder usarlo donde y cuando queramos, incluso en casas diferentes. Por ejemplo, si nos vamos de vacaciones a un lugar en el que suela hacer frío, o a un hotel o a una casa rural, llevar el calefactor portátil debajo del brazo puede ser tan vital como lo es para algunos llevar su propia almohada.
En una misma casa, podemos hacer la inversión de colocar un calefactor fijo de los de pared en cada estancia que queramos calentar, si es éste el sistema de calefacción que necesitamos, o el refuerzo para la calefacción central de la que ya dispongamos. Pero si lo que necesitamos es un sencillo refuerzo para días puntuales en los que hace mucho frío pero no es necesario poner la calefacción de toda la casa (porque vamos a estar sólo en la cocina, o en el baño antes de salir de casa, o en el salón jugando con los niños, etc.), en estos casos un calefactor portátil es la mejor opción.
Otra ventaja de los calefactores portátiles, es la de poder moverlos dentro de una misma estancia, colocarlos en el suelo o sobre una mesa, etc.; con lo que esto significa a la hora de facilitar el calentamiento de cada espacio, dirigiendo el chorro de calor hacia los lugares que más lo necesiten, o que más nos interese. Con un sistema de calefacción fija, evidentemente, no tenemos tanta libertad de movimiento, más allá de la capacidad de oscilación de las aspas (en su caso).
Eso sí, si no tienes claro qué calefactor portátil comprar, deberías poner mucha atención a la relación de potencia y capacidad de calentamiento de cada dispositivo, teniendo en cuenta el tamaño de las estancias o de la estancia en la que vayas a colocarlo.
Cuándo y dónde comprar un calefactor portátil
Los calefactores portátiles son los más comprados de todos los tipos de calefactores, por prácticos, baratos y eficientes en la mayoría de los casos. Por eso, no tendremos problemas para encontrar más de dos modelos en cualquier ferretería a la que acudamos. Pero si queremos una mayor oferta, tenemos que acudir a un gran centro de tecnología tipo Mediamarkt, el Corte Inglés, etc.
Sobre el cuándo, tampoco debemos descuidarnos, ya que ni a comienzo de verano, cuando las tiendas están llenas de aparatos de frío, ni metidos en pleno invierno, cuando los calefactores suelen ser más caros. El mejor momento para comprar un calefactor portátil es el final de verano e inicio del otoño, cuando el stock está intacto y los precios aún no se deben haber disparado.
Si preferimos la opción online, el catálogo de calefactores portátiles Amazon es enorme, como hemos podido ver en esta pequeña review, y siempre podemos contar con la valiosa opinión de otros compradores para hacernos una idea de lo que ofrece cada producto.
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