Se aproxima el invierno, y llega el momento de plantearnos el sistema de calefacción con el que calentaremos nuestro hogar durante estos meses más fríos del año. Nuestro objetivo es encontrar una opción que reúna dos requisitos fundamentales: que sea eficaz a la hora de calentar nuestra casa, y que su uso y mantenimiento sea lo más económico posible. Parece una utopía, ¿verdad? Sin embargo, esa opción existe, y se llama radiador de baja temperatura.

¿Sorprendido? ¿Intrigado? No te preocupes: en este artículo, vamos a compartir contigo todo lo que necesitas saber sobre este interesantísimo sistema de calefacción para que, llegado el caso, puedas comprar radiadores de baja temperatura con total seguridad. ¿Empezamos?

¿Qué son los radiadores de baja temperatura?

Lo primero de todo, y antes de profundizar en detalles y características más concretas, será presentar una pequeña definición, a grandes rasgos, de aquello de lo que vamos a hablar aquí. ¿Qué es un radiador a baja temperatura?

Como ya nos sugiere su propia denominación, un radiador a baja temperatura es un radiador que no precisa una temperatura demasiado elevada para poder funcionar. Es más, los radiadores de baja temperatura pueden funcionar sin problemas entre los 35º y 50º C (temperaturas muy inferiores a lo que vemos en otros tipos de radiadores, como los de hierro fundido, que necesitan 80º C, o los de aluminio, que funcionan a más de 60º C).

¿Y qué conclusión podemos extraer de esta cualidad de trabajar a menor temperatura que otros radiadores más convencionales? Pues ni más ni menos que, al necesitar menos calentamiento del agua, supondrá un notable ahorro en la cantidad de energía que se va a producir. De ahí, que estos radiadores de baja temperatura se combinen tan bien con las bombas de calor, ya que estas también trabajan a muy baja temperatura.

¿Cómo funciona un radiador de baja temperatura?

Como acabamos de ver, la «magia» del ahorro de estos radiadores consiste en su capacidad para trabajar con temperaturas mucho más bajas que otras variantes de radiadores. Pero ¿cómo funcionan los radiadores a baja temperatura, exactamente?

Pues lo cierto es que no hay mucho secreto, ya que la base del funcionamiento de los radiadores de baja temperatura es muy similar a la de los radiadores tradicionales. Dicho con otras palabras: aquí, también nos encontramos con un circuito de agua caliente en el interior del radiador que aumenta la temperatura de este, y que emite energía térmica (es decir, calor) hacia la estancia donde esté instalado. Como ves, funciona exactamente igual, pero con una pequeña particularidad que se traduce en una gran diferencia de rendimiento… Y es que el radiador de baja temperatura es mucho mejor transmisor de energía calorífica que el radiador convencional.

¿Y cuál es el motivo de ello? Muy fácil: que los radiadores de baja temperatura contienen entre un 80% y un 90% menos de agua que los radiadores tradicionales.

Radiadores de baja temperatura: precio

Vamos ahora con uno de los aspectos que más nos interesa sobre este tema, que es el que está relacionado con nuestro bolsillo: ¿cuánto cuestan los radiadores de baja temperatura? Pues hemos de decirte que, lamentablemente, esta variante de radiador es ligeramente más cara que otros modelos de radiadores más convencionales. No podemos darte una cifra concreta (ya que dependerá de factores como el tamaño, la calidad o la marca), pero podemos decirte que la mayoría de radiadores de baja temperatura su pueden encontrar entre los 200 y los 350 euros.

Sin embargo, debemos señalar que el precio de los radiadores de baja temperatura no es tan importante. Sí, hay que hacer una inversión al principio, pero se rentabilizará muy pronto, gracias al gran ahorro energético que supondrá el uso de radiadores de baja temperatura para calentar nuestro hogar. Y no hablamos de cantidades pequeñas, pues se estima que podremos disfrutar de, aproximadamente, un 35% de ahorro en la factura de la calefacción.

Radiadores de baja temperatura: opiniones

Ahora que ya conocemos las características de los radiadores de baja temperatura, no nos resultará demasiado complicado hacernos una mejor idea de lo que puede suponer para el usuario medio la adopción de este sistema de calefacción para su casa.

Las opiniones sobre los radiadores a baja temperatura son unánimes entre la población que cuenta con este sistema en sus hogares. Todo el mundo coincide en que, a pesar del desembolso inicial que hay que hacer (recordemos que estos radiadores pueden ser algo más caros que los modelos convencionales), su uso compensa con creces, ya que el ahorro de los radiadores de baja temperatura es más que notable.

Entonces, ¿es recomendable usar radiadores de baja temperatura? Rotundamente, sí. Además, piensa que se trata de una propuesta de ahorro a largo plazo… Cuanto más tiempo los uses, más dinero ahorrarás en la factura de la calefacción. ¡Y sin perder ni un ápice de efectiva en comparación con otros métodos de calefacción!

Ventajas de los radiadores de baja temperatura

Aunque hayamos puesto el foco de atención sobre el bajo consumo de los radiadores de baja temperatura, lo cierto es que esta es solo una de sus muchas virtudes. Como podrás ver a continuación, esta modalidad de radiadores conlleva un buen número de ventajas adicionales:

  • Consiguen alcanzar la temperatura en muy poco tiempo, ya que poseen poca inercia térmica.
  • Se sirven de la baja temperatura del agua, para aumentar el rendimiento de los sistemas de calefacción domésticos.
  • Son muy versátiles, pues se pueden utilizar tanto en instalaciones convencionales (calderas estándar), como en otros tipos de instalaciones más eficientes (por ejemplo: calderas de condensación, aerotermia, geotermia, etc.).
  • Si trabajamos con convección, podemos complementar los radiadores de baja temperatura con elementos dinámicos para obtener una eficiencia aún mayor.
  • A dí de hoy (y no parece que sea algo que vaya a cambiar a corto o medio plazo), son los radiadores más eficientes del mercado.
  • Proporcionan un notable ahorro de energía.
  • Al ser productos modernos, sus diseños están muy cuidados y trabajados, lo que los convierte en una solución más estética que otros tipos de radiadores del mercado.
  • Nos brindan un rápido período de amortización, ya que, aunque la inversión inicial puede resultar algo más costosa, el gran ahorro que proporcionan hace que se compense rápidamente.

Inconvenientes de los radiadores de baja temperatura

Como reza el dicho popular, «no todo lo que reluce es oro»… Y es que, tenemos que reconocerlo, estos radiadores no son perfectos (de ser así, no tendrían competencia, y todo el mundo los usaría). Sin embargo, sí que podemos decirte que las desventajas de los radiadores de baja temperatura son mínimas, y no ensombrecerán en absoluto la calidad de estos productos. Vamos a conocer cuáles son esos «puntos débiles»:

  • El precio de un radiador de baja temperatura es algo superior (aunque no mucho) al de otros modelos de radiadores más tradicionales. Esto conlleva una mayor inversión inicial.
  • Al ser un producto relativamente novedoso y que todavía no goza de una gran implantación en el mercado, resulta más difícil encontrar estos productos en las tiendas.

¿Se pueden instalar radiadores de baja temperatura en un piso?

Muchos usuarios nos preguntamos si es posible instalar radiadores a baja temperatura en un piso, y la respuesta es que sí que se puede. Pero si se cumplen ciertas condiciones…

El requisito más importante es que el piso cuente con una bomba de calor. Además, también será aconsejable que el piso cuente con unas dimensiones más bien generosas, pues es en las grandes superficies donde el radiador de baja temperatura funciona de manera más eficiente.

Hay que recordar que, si lo que pretendemos es ahorrar en el consumo de calefacción de nuestra vivienda, los radiadores de baja temperatura serán una magnífica inversión que podremos llevar a cabo para disponer de un gran sistema de calefacción durante el invierno, al mismo tiempo que disfrutamos de un notorio ahorro de energía en nuestro piso o casa.

¿Se puede usar una caldera con radiadores de baja temperatura?

Aunque es cierto que lo más aconsejable y eficiente en términos de ahorro del consumo para este sistema de calefacción es la instalación de una bomba de calor, hay que señalar que también es posible combinar los radiadores de baja temperatura con calderas de condensación. Pero, ojo, porque es importante que la caldera de condensación cuente con un rango de modulación alto, si queremos sacar el máximo provecho posible. Y es que, cuantas más etapas de modulación tenga, más eficiente será la caldera y mayor será el ahorro de consumo que disfrutaremos. Por esta razón, lo más recomendable será usar calderas de condensación con un rango de modulación de 1:7, 1:9 o 1:10 para la combinación de radiadores de baja temperatura.

Alternativas a los radiadores de baja temperatura

¿Qué ocurre si no sabemos dónde comprar radiadores de baja temperatura o si no podemos permitirnos su precio? Tenemos varias opciones a nuestra disposición: desde preguntar a nuestro suministrador de calefacción dónde podemos conseguirlos (lamentablemente, a día de hoy, no es posible encontrar radiadores de baja temperatura en Amazon u otras tiendas similares), o bien optar por productos alternativos de características más o menos similares. Si te decantas por esta segunda vía, te recomendamos que le eches un vistazo a nuestra guía sobre los radiadores de bajo consumo.

Y ya que hemos mencionado a Amazon, ¿qué tal si echamos una ojeada a los radiadores más vendidos en nuestro país, para conocer qué tipo de productos escogemos los españoles en sustitución de los radiadores de baja temperatura?

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